Las crisis nos presentan la oportunidad de
enfrentar lo desconocido y arriesgarnos a dar forma, estructurar e implementar
acciones que permitan desarrollarnos como individuos, son tiempos decisivos que
abren posibilidades para avanzar.
Las crisis nos empujan al cambio, porque lo
que veníamos haciendo, por muy exitoso que fuera, ya no funciona y aquí se
produce la crisis que se puede ver, inicialmente, como catástrofe.
Sólo se pasa de una etapa de la vida a la
siguiente cuando se logra reestructurarla con tareas nuevas, desafiantes, que
modifican la estructura anterior o el modo de hacer las cosas antes. Da susto
porque es entrar en un terreno desconocido y tendemos a seguir haciendo las
cosas desde lo conocido… que ya no nos sirve más. Sin embargo, para avanzar y
desarrollarse es necesario afrontar las situaciones, analizarlas y
reacomodarnos a la nueva situación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario